01 Ene Anneloes Gerdien
Período de residencia: Enero-Febrero 2019
Web
Enero 2019
Wasted Wood
En el trabajo de Anneloes Gerdien, el proceso es tan importante como el resultado final. Establece un diálogo con el nuevo entorno como medio para reinventarse.
Anneloes combina su práctica artística con un enfoque arqueológico. Trabaja con objetos encontrados, aparentemente inútiles, dándoles un nuevo sentido, convirtiéndolos en sus «pequeñas esculturas».
En los primeros días de su residencia, Anneloes comenzó a descubrir su entorno caminando por el paisaje y recolectando objetos que perdieron su propósito original. En lugar de imponer su mirada sobre ellos, le sirven de punto de partida para dar forma al proceso creativo, no solo adapta a la imaginación del artista, sino también al artista que se adapta a las características únicas del objeto. Por lo tanto, el acto de limpiar y preparar, seguido de una forma libre e intuitiva de pintar, se guía por el propósito de examinar y revelar el carácter y las estructuras orgánicas de una pieza específica. Al mismo tiempo, el uso de una paleta suave pero colorida y contrastante refleja el diálogo entre el artista y el ambiente particular de Blanca.
Durante los estudios abierto los visitantes podrán elegir los objetos que la artista intervendrá durante el próximo mes, pudiendo ver los su transformación la apertura del próximo mes.
Febrero 2019
En su segundo mes de residencia, Anneloes continuó con las piezas que inició durante los estudios abiertos anteriores, donde los visitantes podían elegir objetos encontrados para que la artista los interviniera. Después de terminar esas piezas, Anneloes buscaba un lienzo en blanco que le permitiera moverse libremente. Los cuadros que ahora podemos ver en las paredes son los resultados de esta búsqueda.
Durante su proceso artístico, Anneloes no impone una noción sobre los materiales, sino que se adapta a sus atributos inherentes. El punto de inflexión ha consistido en trabajar de forma tridimensional utilizando el espacio como catalizador de su habilidad compositiva. Al permitir la observación de las piezas desde nuevos ángulos, la artista contempla dar una mayor autonomía a las obras, una mayor independencia respecto de la artista, produciéndose a su vez nuevas dependencias con el espacio y el resto de elementos que la rodean. La artista produce una serie de piezas y las organiza de modo que permita un diálogo complejo entre las obras, su entorno y el espectador.
De este modo, el espacio expositivo acoge una instalación que proporcione una experiencia visual diferente al observarla desde distintos ángulos, y permite a los visitantes vagar libremente, siguiendo los patrones que estos elijan.
La instalación no impone un cuadro de interpretación a los espectadores, sino que crea espacio para el descubrimiento y la libre comprensión.